La ONG Human Right Watch ha denunciado en un informe, publicado el pasado 1 de agosto, la “amenaza para los migrantes y refugiados” que supone el uso de drones en el Mediterráneo por parte de la agencia europea del control de fronteras Frontex.
Según el detallado análisis publicado por esta organización en colaboración con la agencia Border Forensics, el pasado 30 de julio, los drones de Frontex “ayudaron” a la guardia costera libia a localizar e interceptar dos embarcaciones en las que viajaban, al menos, 228 migrantes que fueron devueltos al territorio libio.
Desde ambas ONGs, a las que también se les suma la organización privada de rescate Sea-Watch, han pedido a Frontex que aclare cómo sus métodos de vigilancia podrían estar ayudando a las autoridades libias a detectar e interceptar los barcos de migrantes que se encuentran en las aguas del Mediterráneo.

Pues según el seguimiento del avión del Seabird, el vehículo de vigilancia de Sea-Watch, aquel día el dron de Frontex avistó en dos ocasiones una de las embarcaciones que poco tiempo después fue interceptada por la guardia costera libia.
El problema de la devolución a Libia
Según la OIM (la organización de la ONU dedicada a los migrantes), durante el año 2021 las autoridades libias llegaron a interceptar hasta 32.425 migrantes que fueron devueltos a los campos de refugiados del país africano que sigue acumulando denuncias por el trato que da a estas personas.
De hecho, han sido las organizaciones como OIM o ACNUR las que han denunciado repetidamente la falta de seguridad de los migrantes que son devueltos a Libia y que se suelen enfrentar a detenciones arbitrarias y condiciones inhumanas como palizas, torturas y violaciones. Incluso se han llegado a atestiguar casos de muertes de migrantes en las prisiones que son controladas por las diferentes milicias libias, algunas de ellas apoyadas por el gobierno central.
Es por ello que ni HRW ni otras organizaciones humanitarias entienden el papel de Frontex en la devolución de migrantes a territorio libio.
El testimonio de Dawit
El mismo informe donde se recoge la denuncia contras las actuaciones de Frontex también incluye el testimonio de uno de los migrantes que fue devuelto a Libia tras una intercepción en el mar por parte de la Guardia costera.
“No sabíamos que eran los libios hasta que el barco se acercó lo suficiente como para ver la bandera. En ese momento comenzamos a gritar y a llorar. Un hombre intentó saltar al mar y tuvimos que detenerle. Peleamos, hicimos todo lo posible para que no nos llevaran de vuelta pero no pudimos hacer nada al respecto”, relata Dawit, un refugiado eritreo que se encontraba en una de las embarcaciones interceptadas junto a su mujer y su hija.
Según HRW, después de ser devueltos a Libia, Dawit y su familia estuvieron dos meses en prisión y solo fueron liberados después de haber pagado una multa de 1.800 dólares (unos 1.761 euros). Actualmente todavía están en Libia a la espera de salir de uno del campo de refugiados en el que se encuentran.
La respuesta de Frontex
Desde la web de noticias InfoMigrants se han puesto en contacto con Frontex para saber cuál es su respuesta ante estas acusaciones, a lo que la agencia europea ha respondido por escrito: “Frontex nunca se ha involucrado en ninguna cooperación directa con las autoridades libias y no coopera con la Guardia Costera de Libia”. A lo que añadían que su “prioridad en cualquier posible búsqueda y rescate es salvar vidas”-
No obstante, sí que confirmaban su posible interacción con las autoridades de Libia, “cada vez que un avión de Frontex detecta un barco en peligro, alerta de inmediato a los Centros de Coordinación de Salvamento Marítimo pertinentes de la región. Italia, Malta, así como Libia y Túnez si el barco tiene una orden emitida de búsqueda y rescate, pues los cuatro son MRCC (Maritime Rescue Coordination Centre) reconocidos internacionalmente”.
Es decir, aunque Frontex no colabora directamente con las autoridades libias, en el caso de que uno de sus drones de vigilancia aviste a un barco de migrantes en las aguas del Mediterráneo que pertenecen al país africano, sí emitirá un aviso que puede ser detectado tanto por la Guardia Costera libia como por la tunecina, la italiana o la maltés.